Con cada pareja surge la posibilidad de encontrar a tu alma gemela, pero realmente ¿Existen las almas gemelas? Puede que sí…
Muchas personas esperan encontrarse con su alma gemela por sorpresa o azar ¿Cuál es la probabilidad de encontrar un boleto de lotería premiado en mitad de la calle? ¿El azar te garantiza que ese boleto tenga un premio mayor que otro que has ido a comprar tú? Claramente no.
El alma gemela se hace, no nace.
¡Cuantas personas me encuentro con la misma falsa ilusión! «Si no nos llevamos bien a la primera, es que no es la persona adecuada«. Este tipo de idealización del amor, es como decirle al camarero que nos traiga lo que quiera y que acierte justamente con lo que más nos apetece.
Ese flechazo que enseñan en los dibujos animados, «de golpe y sin poderlo remediar, en una primera mirada, ya no puedes pensar en nadie más», puede ser muchas cosas, pero desde luego, no nos garantiza el éxito en la relación de pareja. Lo que nos garantiza, es la frustración cuando no está y se tiene idealizado, o la dependencia emocional cuando si se da, con la persona menos adecuada. Porque para entender cómo funciona, hay que saber a qué nos estamos refiriendo cuando hablamos del alma gemela.
¿Qué es un alma gemela?
Media naranja, corazón partido, amor verdadero, son títulos de canciones y formas de llamar a este concepto que flota en el inconsciente colectivo, pero que parece demasiado ambiguo para ser real. El alma gemela, no es un concepto que apoye la psicología ortodoxa, porque se entiende como un concepto propio del «pensamiento mágico«. Sin embargo, y al margen de las preferencias de la psicología ortodoxa y demás catedráticos de rancio abolengo, el concepto popular de pareja ideal, de amor verdadero, etc,. es tan real como el número en aumento de paginas y aplicaciones para emparejarse. Podemos definir el alma gemela, como aquella categoría a la que acede una persona cuando se adapta bastante bien al perfil de la pareja que más potencial tiene para COMPARTIR nuestra felicidad, tanto a nivel emocional, como físico o mental, y que además, comparte hacia nosotros el mismo tipo de atracción o de sentimiento romántico. Entonces, no tiene sentido hablar de alma gemela en singular ¿No? Porque para serlo hace falta que el significado sea vivido por los dos miembros de la pareja al mismo tiempo, entonces son: almas gemelas. ¿Si no hay amor recíproco puede ser una alma gemela?…
¿Mi pareja actual puede ser mi alma gemela?
Véase, que el hincapié puesto en la palabra COMPARTIR. La respuesta a esta pregunta, pasa por ver algunas cuestiones:
- ¿Hay independencia emocional?
- ¿Estás dándote lo que necesitas, sin pedirle a tu pareja que te de lo que tendría que haberte dado otra persona?
- ¿Tu relación de pareja te permite ser 100% tu mismo/a?
- ¿Desde que estás con esa persona a mejorado tu forma de ver el mundo y eres una mejor versión de ti?
Si todas estas respuestas son afirmativas sólo te falta observar los 3 puntos elementales de una buena relación de pareja.
Los 3 elementos del alma gemela: confianza, respeto e intimidad.
- La confianza es el resultado del tiempo, por ello, las almas gemelas no se hacen en un día. Si conoces a tu pareja desde hace un mes, la confianza no será igual cuando la relación vaya por el quinto aniversario. Tampoco la duración de una relación es garantía de éxito, pero eso lo hablaremos otro día. Para que exista esta confianza, hay que experimentar repetidas veces, que la otra persona no supone ningún tipo de peligro, y que puedes ser tu mismo/a sin recibir represarías o castigo.
- Cuando entiendes los gustos y preferencias de tu pareja y procuras no herir o mentir, estás practicando el respeto. La eterna pregunta ¿Tengo que ser completamente sincero/a con mi pareja para que haya respeto? La sinceridad no es un concepto total, porque depende del observador. La sinceridad moral, es aquella que nos invita a compartir aquello que sabemos que no estaría moralmente bien visto esconder. Hay que tener tacto, no dobles caras. ¿Si alguien le es infiel a su pareja, hay respeto?
- Por intimidad vamos a entender la capacidad para dejar a la otra persona que entre en nuestro espacio personal, que no es sólo lo cómodos o no que estemos con alguien a menos de un metro de distancia, también incluye la intimidad familiar, las amistades, los gustos, las redes sociales, etc. La intimidad dentro de las relaciones de pareja requiere también de la intimidad sexual. ¿Acaso se pueden ser almas gemelas sin que exista pasión? No, dos almas gemelas sin pasión, son simplemente, gemelos.
Llegamos entonces, a la eterna pregunta del soltero/a:
¿Cómo encuentro a mi alma gemela?
Para encontrar algo, primero hay que tener muy claro qué se está buscando. La mayoría de personas saben lo que no quieren por las experiencias emocionales del pasado. Pero para encontrar hay que afinar muy bien la búsqueda, casi como si pidieses a esa persona a una fábrica, de hecho, se la estás pidiendo al universo/dios… , así que intenta concretar todo lo que puedas. La mejor opción es hacer una lista, puede parecer una obviedad, pero en el acto de elaborar la lista, estás siendo consciente de cómo ha sido de explícita tu búsqueda hasta el momento. Pongamos por ejemplo, una chica que busca a un chico.
- Simpático.
- Culto
- Sano.
- Fogoso….
Esta es la lista normal, pero esto a efectos del inconsciente es como que salgamos a la calle queriendo ganar dinero, y caiga en nuestro zapato el boleto premiado de la lotería del día, sólo pasa en las películas, y no somos los/las protagonistas de ninguna comedia romántica de wolibod.
- Simpático ¿Cuánto? Lo suficiente para que me cuente un chiste cuando esté triste, pero no tanto como para que no se de cuenta de que estoy triste.
- Culto ¿Para hacer qué? Lo bastante culto para que hable de más cosas que fútbol, política y cotilleo, pero no tanto, como para tener que ir de museo en museo todos los domingos.
- Sano ¿a qué te refieres con sano? Que no tenga adicciones y se cuide el colesterol, o que practique yoga a las 6:30 y sólo coma alimentos eco y vegetales.
El alma gemela es algo recíproco, como ya hemos comentado. No podía faltar lo más importante:
¿Te sientes capaz de ser el alma gemela de otra persona?
Pregunta básica que rara vez nos hacemos de forma consciente, pero que sin esta cuestión la posibilidad de iniciar la búsqueda queda relegada a una mera ensoñación. Si no te sientes lo suficientemente válido/a irás por la vida escondiéndote, y pasarás completamente desapercibido/a para todo el mundo. El primer bloqueo para empezar a buscar a esa persona está en el sentimiento de no ser capaz de encontrar o atraer a la persona adecuada. Eso te deja en dos situaciones igualmente tristes:
- Te conformas con lo primero que encuentras. (sin confianza, ni respeto o intimidad)
- Renuncias a tener pareja.
