Cuando se aprende a meditar se puede apreciar con mayor intensidad el diálogo interno, esa especie de voz que suena internamente y que es la misma que estás escuchando ahora al leer esto. La llamaremos la voz interior, y si le damos voz y nos descubrimos hablando solos: soliloquio. Este diálogo interno nos ayuda a tomar nota de nuestros pensamientos, pero también se convierte en una máquina continua de emitir juicios. «Esto está mal», «Estás llegando tarde»…
La forma en la que nos habla esa voz interior no siempre es neutra, en muchas ocasiones, ese diálogo está cargado de reproches y desvalorización. En otras ocasiones no es nada amable ni paciente, y este tono ácido y corrosivo para la autoestima, tiene su origen en la forma en la que se comunicaba con nosotros el exterior en nuestra infancia.
No podemos pensar que es nuestra mente ayudándonos a ser mejores versiones de nosotros mismo (aquí se nos habría colado el YO IDEAL en todo su esplendor). No es nada positivo si implica sufrimiento o desgaste emocional. Hemos padecido ambientes tóxicos para nuestra autoestima en la infancia o adolescencia, y estamos repitiendo la misma melodía pero ahora viene desde el interior.
¿Cómo podemos mejorar nuestra voz interior?
Primero hace falta identificarla, no confundirla con un pensamiento neutro y ver la «huella» que deja. Después de que nuestra voz interior haya sonado autoritaria, criticona, lastimosa, agresiva, e incluso chantajista, podremos ver la reacción emocional que nos produce. Simplificando mucho el proceso, nos hablaremos de forma muy similar a como nos hablaron en la infancia, y la emoción que produzca esta voz interior, se parecerá sospechosamente a como nos hacían sentir en nuestra infancia.
Después es necesario observar la temática por la que se «cuela» en nuestros pensamientos, aquellas cuestiones por las que creemos que está justificada su presencia, como por ejemplo: la opinión de los demás, evitar que cometamos un error, dejar de actuar con alguna característica que nos molesta, mejorar otras, etc. Una vez que sabemos cómo nos hace sentir la voz interior y en qué temáticas tiene más presencia.
¿Cuándo empezaste a criticarte?
Hacer memoria del posible origen en el tiempo del auto-sabotaje. ¿Desde cuándo está esa voz en nuestra mente? ¿En los recuerdos de alguna edad concreta no está? ¿Podemos recordar alguna escena en concreto donde tuviese aún más protagonismo? Seguramente esta voz interior esté muy relacionada con elementos traumáticos de la infancia o la adolescencia, y desde entonces se diseñó como una forma de escapar de las críticas del exterior ¿Pero qué sentido tiene conseguir evitar la crítica externa si ahora el crítico vive dentro y opera 24 h. 7 días a la semana?
Hay una parte de nosotros que necesitó amor, y si la voz interior no es amorosa, seguramente sigue necesitándola. No tendrá ningún sentido que esperemos amor desde el exterior, cuando lo que estamos sembrando dentro son críticas y auto-exigencias. Si te has sentido identificado/a y te gustaría empezar a tratarte con mucho más amor, te invito a que participes en el taller Online «Sanando a tu niño interior», donde tendrás las herramientas para cambiar tu presente afectivo, recuperando la felicidad y el multi-potencial de tu niño interior.
Ana Ruiza ha sido una guía y gran ayuda en mi camino hacia la sanación y el autoconocimiento a través de la bioneuroemoción y otras técnicas que aplica, gracias a su conocimiento y enfoque, he experimentado transformaciones significativas… More en diferentes áreas de mi vida. No solo he logrado mejorar mi situación económica, sino que también he fortalecido mis relaciones familiares y lo más importante, he aprendido a amarme y aceptarme a mí misma. Su terapia ha sido verdaderamente transformadora y estoy inmensamente agradecida por su dedicación y apoyo constante.
Sin duda alguna recomendaría el trabajo de Ana María. Es una profesional que me ha ayudado mucho, siempre tan atenta y dulce. Con ella es muy fácil sentirse cómoda y entendida. Me ha enseñado a ver la vida desde otras perspectivas, a no… More ser tan dura y exigente conmigo, proporcionándome herramientas con las que trabajar el amor propio y la seguridad en mi misma. Gracias a ella enfrenté una situación complicada en mi vida de forma sana y eficaz, mejorando mi estado de ánimo desde el primer día que salí de su consulta. Sigo trabajando con ella y volveré siempre que lo necesite.
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Reconozco que tenía cierto rechazo a acudir a una psicólogo/a, hasta que llegué a un punto límite.
Tras varios años y mucha terapia con Ana María, sólo tengo palabras de agradecimiento, a mí me ha cambiado completamente la vida.
Había… More leído muchos libros de autoayuda, muchos vídeos, cursos.... pero nada es comparable con una buena terapia individual
Ana María consigue hacer ver las situaciones desde otra perspectiva, da numerosas herramientas sencillas para ir mejorando y los resultados se notan pronto.
Agradecida de haberla conocido y poder contar con ella siempre.
Trabajar con Ana es luz. Es atenta, cercana, sencilla y una excelente profesional. Es gráfica y transparente en sus explicaciones, te proporciona todas las herramientas necesarias para la recuperación, te escucha y, sobre todo, te comprende.… More A veces da la sensación de que está dentro de ti, sintiendo o viviendo lo mismo. Me está ayudando mucho a conocerme a mi misma y a aprender a gestionar mis emociones.
La recomiendo al 100%.
La humanidad, atención al detalle, escucha activa y empatía en el trato de Ana son admirables. Una gran profesional que te ayuda en momentos complicados y te hace más fácil sobrellevar situaciones y aprender a afrontar las piedras del camino.… More Me siento muy afortunada de contar con su apoyo.
Super recomiendo a Ana María!! La claridad que me brindó acerca de lo que me estaba pasando es algo que no había encontrado hasta ahora en otras terapias. Me gustó mucho su forma de abordar los temas, su coherencia, su calidez, su sencillez… More y su humor Me guió, me dio ejercicios, me proporcionó bibliografía y su email en el cuál me contestó detalladamente mis dudas. Emana muy buena energía y además sabe un montón!! Fue un proceso muy enriquecedor para mí. Super agradecida!!